La reproducción sexual
consiste en la unión de dos gametos para formar un nuevo individuo con una
combinación de características de ambos progenitores.
Un gameto es una célula sexual
(óvulo o espermatozoide). La unión de los núcleos de los gametos se llama fecundación y debe dar por resultado la
formación de un cigoto diploide, que
en total representen el número cromosómico de la especie, por ejemplo, en la
especie humana, 46.
La reproducción sexual es
posible gracias al proceso de meiosis. En seres complejos como el humano se
requiere de la mitosis y la meiosis para mantenerse, desarrollarse y
reproducirse; esta relación se presenta en el esquema a la derecha de este
texto.
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